Entrevistas: Métodos y enfoques de investigación

Como método de investigación cualitativa, la entrevista se utiliza ampliamente para recabar información en profundidad de los participantes sobre sus experiencias, opiniones y perspectivas acerca de un tema específico. Existen diversas técnicas de investigación cualitativa para entrevistas a disposición de los investigadores para lograr el mayor potencial en la recopilación de datos.

En esta sección se ofrece una visión general de la importancia de las entrevistas, los distintos tipos, las herramientas para realizar entrevistas, el análisis de los datos de las entrevistas y las consideraciones éticas de este método de investigación. Tenga en cuenta que la entrevista a grupos focales es un concepto relacionado, pero se tratará con más detalle en la siguiente sección de esta guía, ya que los grupos focales tienen una dinámica ligeramente diferente que hay que considerar.

¿Qué es una entrevista y cuál es su propósito en la investigación cualitativa?

Las entrevistas, como método de investigación cualitativa, desempeñan un papel fundamental a la hora de develar las complejidades del comportamiento humano y la toma de decisiones. Los investigadores pueden observar el comportamiento, por un lado, o pueden investigar las perspectivas y los valores que informan ese comportamiento entrevistando a los participantes en la investigación.

Finalidad e importancia

Las entrevistas permiten a los investigadores ahondar en las experiencias subjetivas de los individuos, lo que proporciona una perspectiva que puede no ser accesible a través de otros métodos de investigación. Iluminan las percepciones, los pensamientos, los sentimientos y la comprensión de las personas sobre un fenómeno concreto.

A diferencia de los métodos cuantitativos, que suelen recoger datos numéricos que pueden analizarse estadísticamente, las entrevistas captan datos ricos y detallados en forma de palabras, ideas y temas. Permiten a los investigadores recopilar datos sobre las experiencias de las personas de una manera sensible al contexto y a la perspectiva individual. A través de las entrevistas, los investigadores pueden explorar los significados que las personas atribuyen a sus experiencias y obtener una comprensión más profunda de los fenómenos estudiados.

Las entrevistas también empoderan a los participantes al darles voz. El entrevistado tiene la oportunidad de expresar sus opiniones, sentimientos y experiencias con sus propias palabras. Este aspecto participativo de las entrevistas subraya el respeto por las experiencias y perspectivas individuales, que es un principio central de la investigación cualitativa.

Comparación de las entrevistas con otros métodos

Aunque las entrevistas comparten muchas similitudes con otros métodos cualitativos, también tienen características únicas que las diferencian. A diferencia de las entrevistas, métodos como las observaciones son más pasivos y se basan más en la interpretaciónde los hechos por parte del investigador.

En cambio, las entrevistas implican activamente a los participantes en el proceso de generación de datos. En comparación con las encuestas, que pueden limitar las respuestas a opciones predeterminadas o límites de palabras, las entrevistas permiten respuestas abiertas y la flexibilidad de explorar temas en profundidad.

Sin embargo, cabe señalar que las entrevistas no tienen por qué ser un método aislado. A menudo se utilizan con otros métodos, como la observación o el análisis de documentos, en un diseño de investigación multimétodo o mixto. Esta combinación de métodos puede aumentar la riqueza y la credibilidad de los datos recogidos, proporcionando una comprensión más holística del problema de investigación.

¿Cuáles son algunos ejemplos de entrevistas en investigación?

La entrevista en investigación cualitativa puede realizarse en varios formatos, cada uno con sus propias ventajas y limitaciones. La elección del tipo de entrevista adecuado depende en gran medida de la pregunta de investigación, la naturaleza del tema, las características de los participantes y los recursos de que disponga el investigador.

Entrevistas personales

Las entrevistas en persona suelen considerarse la forma tradicional de entrevista. Implican una conversación directa entre el entrevistador y el entrevistado. Esta forma permite una comunicación exhaustiva, ya que incluye señales verbales y no verbales como el lenguaje corporal, las expresiones faciales y el tono de voz.

Este tipo de entrevista permite la aclaración inmediata de las respuestas y puede ayudar a fomentar la compenetración entre el entrevistador y el entrevistado, lo que puede dar lugar a datos más ricos y precisos. Sin embargo, este tipo de entrevistas pueden llevar mucho tiempo, ser caras y estar limitadas por la ubicación geográfica.

Entrevistas telefónicas

Las entrevistas telefónicas pueden ser una alternativa práctica cuando las entrevistas cara a cara no son factibles debido a la distancia, el tiempo o las limitaciones presupuestarias. Las entrevistas telefónicas permiten a los investigadores llegar a participantes que pueden estar geográficamente dispersos y ofrecen un nivel de anonimato que puede fomentar respuestas sinceras, especialmente sobre temas delicados.

Sin embargo, pueden carecer de señales no verbales que proporcionen un contexto adicional a las respuestas de un participante. Una entrevista telefónica puede diferir de una conversación en persona en que no se puede ver la cara, los gestos u otro lenguaje corporal de alguien, lo que podría ser útil para contextualizar información detallada.

Entrevistas en línea o por Internet

Las entrevistas en línea o por Internet realizadas a través de plataformas como Zoom, Skype o el correo electrónico se han hecho cada vez más populares en los últimos años. Pueden ser sincrónicas (se producen en tiempo real, como las videollamadas) o asincrónicas (los participantes responden en su propio tiempo, como las entrevistas por correo electrónico).

Estas entrevistas pueden llegar a participantes de todo el mundo, suelen ser rentables y pueden resultar más cómodas tanto para el investigador como para el participante. Sin embargo, dependen de la tecnología y del acceso a Internet, que pueden no estar al alcance de todos los participantes potenciales.

Cómo realizar buenas entrevistas en la investigación cualitativa

Las entrevistas cualitativas son algo más que conversaciones casuales. Algunas entrevistas de investigación cualitativa pueden no seguir una estructura estricta y permitir al investigador explorar cualquier tema en el momento. Por el contrario, otras entrevistas pueden estar muy estructuradas y su objetivo es recopilar el mismo tipo de información de todos los participantes. Como cuestión de investigación empírica, las entrevistas de investigación requieren una cuidadosa planificación, ejecución y reflexión para garantizar que aportan datos valiosos y fiables. He aquí algunos componentes clave a tener en cuenta:

Elaboración de preguntas adecuadas para la entrevista

Las preguntas son la base del éxito de cualquier entrevista. Las buenas preguntas son abiertas, claras y están directamente relacionadas con los objetivos de la investigación. Deben permitir que los participantes compartan sus experiencias, opiniones y sentimientos sin orientarles hacia determinadas respuestas. En la investigación cualitativa, suele ser útil mezclar preguntas más y menos estructuradas, para que las respuestas sean a la vez profundas y amplias.

Establecer una buena relación con los participantes

Establecer una buena relación con los entrevistados es crucial para fomentar respuestas abiertas y sinceras. Las entrevistas en profundidad pueden resultar difíciles si el entrevistador no conoce en detalle al entrevistado o no ha establecido la confianza necesaria.

Los investigadores establecen una buena relación con los entrevistados mostrando empatía, escucha activa y respeto. Aclarar el propósito de la entrevista, garantizar la confidencialidad y pedir el consentimiento antes de empezar también puede ayudar a generar confianza.

Toma de notas y grabación

Es fundamental documentar de forma precisa y exhaustiva los datos de la entrevista. Aunque la grabación en audio o vídeo es muy recomendable por su exhaustividad y precisión, también es beneficioso tomar notas durante o inmediatamente después de la entrevista. Estas notas pueden captar las señales no verbales, las impresiones del entrevistador y cualquier problema o incidente que se produzca durante la entrevista.

Consideraciones éticas

Las consideraciones éticas son primordiales en cualquier investigación con participantes humanos. Los investigadores deben obtener el consentimiento informado, respetar la privacidad y confidencialidad de los participantes y asegurarse de que éstos comprenden su derecho a retirarse del estudio en cualquier momento sin consecuencias negativas. También es importante ser consciente de la dinámica de poder y esforzarse por establecer una relación respetuosa y equitativa entre investigador y participante.

La eficacia de una entrevista cualitativa depende en gran medida de la reflexión y el rigor con que se aborden estos componentes. Las entrevistas no son sólo una herramienta de recopilación de datos ; son una forma de reconocer y respetar las experiencias vividas y las perspectivas de los participantes. Por lo tanto, cada componente debe tratarse con sumo cuidado y consideración.

Tipos fundamentales de entrevistas

La estructura de una entrevista puede influir enormemente en los datos recogidos. El nivel de estructura varía a lo largo de un continuo, con entrevistas estructuradas y no estructuradas ocupando los extremos opuestos de ese espectro.

Entrevistas no estructuradas

Las entrevistas no estructuradas se caracterizan por su flexibilidad. Por lo general, el investigador sólo dispone de una lista de temas o asuntos a tratar, conocida como guía de la entrevista, pero la conversación no sigue un conjunto predeterminado de preguntas. En su lugar, el entrevistador deja que la conversación fluya de forma natural, siguiendo las pistas que le da el entrevistado. Una entrevista no estructurada es especialmente útil cuando el investigador está explorando un nuevo campo de estudio y pretende recabar la máxima información posible sin nociones preconcebidas.

Entrevistas semiestructuradas

Las entrevistas semiestructuradas logran un equilibrio entre flexibilidad y estructura. El investigador dispone de una lista de preguntas predeterminadas para realizar las entrevistas, pero es libre de formular preguntas abiertas adicionales o desviarse de la lista en función de las respuestas del entrevistado. La entrevista semiestructurada es la forma más común de entrevista en la investigación cualitativa, ya que proporciona datos profundos y ricos al tiempo que garantiza que se cubren todos los temas necesarios.

Entrevistas estructuradas

Las entrevistas estructuradas, a veces llamadas entrevistas estandarizadas, son la forma más rígida de entrevista. El investigador formula el mismo conjunto de preguntas predeterminadas en el mismo orden a todos los participantes, con poco o ninguna desviación.

Aunque una entrevista estructurada puede limitar la profundidad de los datos recogidos, permite una mayor coherencia entre las entrevistas. Esto puede ser útil para mantener las respuestas limitadas al tema de la investigación y comparar las respuestas entre los participantes.

Para determinar el nivel de estructura de una entrevista, los investigadores deben tener en cuenta sus objetivos de investigación, la naturaleza del tema y las características de los participantes. Diferentes estructuras se prestan a diferentes objetivos de investigación, y los entrevistadores más eficaces son los que pueden adaptar su enfoque en función de las necesidades de su estudio.

Proceso de realización de una entrevista

La realización de una entrevista en la investigación cualitativa implica una serie de pasos bien planificados antes, durante y después de la entrevista. Estos pasos garantizan que el proceso sea sistemático, ético y capaz de producir datos de alta calidad.

Preparación e investigación previas a la entrevista

Antes de realizar la entrevista, el investigador debe comprender a fondo el tema de la investigación, definir el propósito de la entrevista e identificar a los posibles entrevistados. Es esencial preparar una guía de entrevista con temas o preguntas clave, aunque el nivel de detalle dependerá de la estructura de la entrevista. También hay que ocuparse de la logística, como programar la entrevista a una hora y en un lugar convenientes para el participante y asegurarse de que el equipo necesario está disponible y funciona.

Realización de la entrevista

La entrevista comienza con una introducción en la que el entrevistador explica el propósito de la entrevista, garantiza la confidencialidad y obtiene el consentimiento del participante. A lo largo de la entrevista, el investigador debe tratar de establecer una buena relación, escuchar atentamente y adaptar sus preguntas en función de las respuestas del entrevistado. También deben observarse y anotarse las señales no verbales, ya que pueden aportar información adicional.

Actividades posteriores a la entrevista

Tras la entrevista, es importante agradecer al participante su tiempo y su contribución. A continuación, los investigadores deben transcribir rápidamente la entrevista mientras los detalles aún están frescos.

También deben anotarse las reflexiones y observaciones sobre la entrevista, incluido el contexto, el comportamiento del participante y cualquier suceso inesperado. Estas notas pueden proporcionar un contexto valioso durante el análisis de los datos.

Ejecutar cada una de estas fases con eficacia requiere no sólo una buena planificación y organización, sino también habilidades interpersonales, flexibilidad y respeto por el participante. La calidad de los datos recogidos durante una entrevista depende en gran medida de lo bien que se gestione el proceso de la entrevista.

Transcripción de las entrevistas

La transcripción de los datos de las entrevistas es un paso fundamental en el proceso de investigación cualitativa. Consiste en convertir las entrevistas grabadas en audio o vídeo en texto escrito, lo que proporciona un relato detallado de los diálogos que tuvieron lugar durante las entrevistas.

Las transcripciones permiten examinar, analizar y comunicar los datos con más detalle. Sin embargo, hacer transcripciones puede ser arduo y llevar mucho tiempo. A continuación se exponen algunas consideraciones clave en el proceso de transcripción:

Tipos de transcripción

Existen dos tipos principales de transcripción: literal y limpia. La transcripción literal consiste en anotar todas y cada una de las palabras, pausas y expresiones pronunciadas durante la entrevista. Se trata de un proceso muy detallado y largo, pero puede ser útil cuando el investigador necesita analizar no sólo el contenido de la entrevista, sino también la forma en que se expresó. Por otro lado, la transcripción limpia omite elementos irrelevantes como tartamudeos, repeticiones y palabras de relleno, centrándose en cambio en el contenido esencial de la conversación.

Transcripción manual frente a transcripción automática

Los investigadores pueden optar por transcribir las entrevistas manualmente o utilizar un programa informático de transcripción. La transcripción manual, aunque lleva tiempo, permite a los investigadores familiarizarse íntimamente con los datos y puede ser más precisa, especialmente en diálogos complejos o con matices.

El software de transcripción automatizada, sin embargo, puede ahorrar tiempo y esfuerzo, sobre todo en el caso de grandes volúmenes de datos, aunque puede requerir la comprobación y corrección manual de errores. Algunos investigadores optan por un enfoque híbrido, utilizando software para la transcripción inicial y después comprobando y corrigiendo manualmente el resultado.

Formateo y anonimización de las transcripciones

Para facilitar el análisis, las transcripciones deben tener un formato coherente, con identificadores claros para los distintos interlocutores y marcas de tiempo como referencia. Si hay varios entrevistadores o participantes, el discurso de cada uno debe estar claramente marcado. Además, para garantizar la confidencialidad, en la transcripción debe eliminarse o anonimizarse cualquier información personal identificable. Es especialmente importante tener esto en cuenta en los datos cualitativos, porque los participantes pueden hablar de aspectos de sus vidas a través de los cuales podrían ser identificados, por ejemplo si mencionan nombres concretos, su barrio o su lugar de trabajo.

Comprobaciones de calidad

Por último, es importante comprobar la calidad de la transcripción. Esto puede implicar que una segunda persona coteje la transcripción con el audio o que el investigador vuelva a escuchar partes de la grabación para confirmar su exactitud. Cualquier sección poco clara o inaudible debe marcarse en la transcripción.